No sé si mis amigos llaneros lo recuerden. Yo supongo que sí. Sobre todo, deberían recordarlo los oriundos de Villavicencio, pues él era villavicense. Recordarán, entonces, quién fue el pionero del folclor llanero colombiano, quién comenzó cantando joropos y pasajes por las frías calles bogotanas, quién los cantaba con el punteo instrumental, no del arpa (o harpa, que también con “h” se puede escribir) con que ahora se puntean, sino del requinto y la bandola, y quién catapultó a la fama nacional e internacional, por ejemplo, aquello de “!Ay si sí, yo no soy de por aquí, ay si sí, yo vengo de Casanare”, que cantábamos en la escuela, cuando todavía a los estudiantes los ponían a cantar música colombiana.
Hoy es el aniversario de la temprana muerte del maestro Luis Ariel Rey, el Jilguero del Llano.
Nacido en Villavicencio, intendencia del Meta, el 6 de junio de 1934, murió en la gélida capital colombiana el 31 de mayo de 1975, cuando yo todavía no terminaba de estrenarme como estudiante de derecho y cantaba aquellas piezas folclóricas entre mis compañeros de curso que aún eran mis amigos.
Dejó muchas canciones grabadas con su particular voz y su singular dejo llanero; canciones emblemáticas del inmenso folclor de Colombia, como CARMENTEA, de Miguel Ángel Martín, AY SÍ SÍ, de su propio hermano Gil Arialdo Rey, o GUAYABO NEGRO, de Ignacio Figueredo.
Solamente hasta 1960 llega el arpa a Villavicencio, llevada de la mano del maestro David Parales, y el grupo llanero que acompañará al maestro Luis Ariel Rey a partir de ahí quedará conformado por este instrumento, el cuatro y las maracas, tal y como se conoce hoy en día.
Para honrar su memoria, compartimos con nuestros amigos las canciones “PASILLANEANDO”, de José La Riva Contreras, y “PAISAJE MATINAL”, de Miguel Ángel Martín.
¡¡¡ BIENVENIDOS !!!
